lunes, 24 de marzo de 2025

Monaguillo en los Escolapios de Barbastro

 La iglesia de los Escolapios de Barbastro tenía misas semanales el sábado por la tarde y el domingo por la mañana.

Iglesia Escolapios Barbastro

La labor del monaguillo era preparar los hábitos del sacerdote, preparar el altar con el cáliz, los libros y las vinajeras, encender las velas y las luces. Y abrir y cerrar las puertas del templo. Además de pasar la bandeja.

La sacristía antigua ha desaparecido. Desde el colegio se accedía bajando unas escaleras. Había una gran habitación. Estaba el Lavatorio escondido con unas cortinas. Y un gran armario donde estaban las albas, las casullas (con sus distintos colores), los libros, los purificadores, los corporales y las almohadas donde reposaban los libros. Además de los cálices, copones y otros elementos litúrgicos.

Sacristía antigua

Se pasaba a la pieza más estrecha que daba lugar a un cuarto donde se guardaba de todo. Se bajaban unas escaleras. En la estancia había un armario, el vino y el aparato de sonido. Aquí había dos entradas distintas desde la iglesia.

Una de las cosas que estaban más protegidas era el vino. Había un tonel y se pasaba a una botella. Se compraba vino rancio en Vinos Murillo.

Vinos Murillo

Se iba a las capuchinas a buscar las ostias. Daban los recortes a los monaguillos. También, se llevaba para limpiar los purificadores, las albas, los corporales y los manteles. No se veía a las monjas. Había un torno para entregar y recoger las cosas comentadas. Se iniciaba la conversación con: Ave María Purísima. Contestaban: Sin pecado concebida.

Capuchinas de Barbastro

Daniel Vallés Turmo

Marzo de 2025