Antillón es un pueblo oscense situado junto a la antigua vía romana pasado el río Alcanadre en dirección a Huesca.
Manuel Benito lo describía así en el 2004 en el Diario del Altoaragón: "Antillón se sitúa cercano a la calzada romana Ilerda-Osca, su origen romano sigue siendo incuestionable, derivado del nombre de su primer propietario Antilio. Se han descrito vestigios de una villa romana en sus términos cuyo asentamiento no coincide con la actual población., El pueblo que hoy conocemos parece una reubicación de época musulmana, con el fin de responder a las necesidades defensivas de la Marca Superior de Al Andalus. Su hisn o castillo se instaló en un espolón rocoso sobre el casco urbano y formaría parte de la misma red defensiva -husun- que los de Bespén y Blecua."
Manuel Benito lo describía así en el 2004 en el Diario del Altoaragón: "Antillón se sitúa cercano a la calzada romana Ilerda-Osca, su origen romano sigue siendo incuestionable, derivado del nombre de su primer propietario Antilio. Se han descrito vestigios de una villa romana en sus términos cuyo asentamiento no coincide con la actual población., El pueblo que hoy conocemos parece una reubicación de época musulmana, con el fin de responder a las necesidades defensivas de la Marca Superior de Al Andalus. Su hisn o castillo se instaló en un espolón rocoso sobre el casco urbano y formaría parte de la misma red defensiva -husun- que los de Bespén y Blecua."
Murallas de Antillón |
"La llegada de los aragoneses en el siglo XII, la situó en la esfera señorial siendo cabecera de una importante baronía que regentaron varios nobles aragoneses. Uno de ellos fue Sancho de Antillón ricohombre que acompañó al rey Pedro III en todas sus conquistas y batallas. En una de ellas: la de Muret, perdió la vida defendiendo a los súbditos albigenses del monarca, derrotados por las tropas fieles al Papa, éste excomulgó a quienes se le enfrentaron y el cadáver de Sancho no pudo ser enterrado en sagrado. Su familia decidió traerlo a la cabecera de la baronía y aunque la iglesia no admitió en su seno a un excomulgado se buscó la solución de enterrarlo en un sepulcro, adosado a la torre, fuera del templo pero pegado a él, era lo más que permitieron los curas.
Como si una maldición se cerniera sobre Sancho, casi ochocientos años después, una campana se desplomaba y caía sobre su sarcófago destrozándolo. Uno de nueva factura mantiene el recuerdo de esta alma en pena, en el mismo sitio donde estaba el anterior."
Merece la pena acercarse para visitar su casco histórico donde contemplaremos sus murallas y dos elementos que llaman la atención, la iglesia con la tumba fuera de Sancho de Antillón y un horno de pan, además de sus murallas, cárcel y un molino de aceite.
Existen paneles indicativos que explican todos los elementos que podemos visitar en menos de una hora.
Ruta propuesta marcada en un mapa de 1930 |
Como si una maldición se cerniera sobre Sancho, casi ochocientos años después, una campana se desplomaba y caía sobre su sarcófago destrozándolo. Uno de nueva factura mantiene el recuerdo de esta alma en pena, en el mismo sitio donde estaba el anterior."
Merece la pena acercarse para visitar su casco histórico donde contemplaremos sus murallas y dos elementos que llaman la atención, la iglesia con la tumba fuera de Sancho de Antillón y un horno de pan, además de sus murallas, cárcel y un molino de aceite.
Existen paneles indicativos que explican todos los elementos que podemos visitar en menos de una hora.
Tumba de Sancho de Antillón y horno de pan |
Junto al ayuntamiento encontramos un cartel que nos aconseja realizar dos pequeñas rutas, una a la fuente vieja y otra que visita el pozo aljibe, el lavadero, San Cosme y una antigua noria. El recorrido está marcado con un postes indicativos.
Ruta del agua |
Esta ruta la podemos hacer en poco más de una hora, más lo que paremos en las visitas. Son 5 kilómetros. Podemos consultar y descargar la ruta en wikiloc.
1. Bodegas Valdovinos
Apenas 500 metros del pueblo nos encontramos Bodegas Valdovinos perteneciente a la Denominación de Origen Somontano. Podemos catar sus vinos poniéndonos en contacto para fijar un día de visita.
Durante esta visita existe la opción de realizar una cata en la propia bodega o un almuerzo en la misma. Grupos máximos hasta 20 personas. Vale la pena la visita. Mención especial tiene su nuevo vermú.
Podemos contactar por mail o por teléfono 974 26 04 37 // 689 48 86 02// 677 16 96 37.
Apenas 500 metros del pueblo nos encontramos Bodegas Valdovinos perteneciente a la Denominación de Origen Somontano. Podemos catar sus vinos poniéndonos en contacto para fijar un día de visita.
Cata en Bodegas Valdovinos |
Durante esta visita existe la opción de realizar una cata en la propia bodega o un almuerzo en la misma. Grupos máximos hasta 20 personas. Vale la pena la visita. Mención especial tiene su nuevo vermú.
Podemos contactar por mail o por teléfono 974 26 04 37 // 689 48 86 02// 677 16 96 37.
2. Pozo Aljibe
En el kilómetro 1 nos encontramos un Pozo Aljibe. Al acercarnos veremos murciélagos que viven dentro. Manuel Benito lo describía así en el 2004 en el Diario del Altoaragón "entre los siglos XIX y XX se excavó un aljibe en el Camino de la Armunia de mayor capacidad que recoge aguas de lluvia mediante filtraciones, a través de dos caños practicados a poniente y a septentrión. La obra se dio por finalizada en 1930 con una caseta en cuya puerta de acceso metálica figura la fecha.
En el kilómetro 1 nos encontramos un Pozo Aljibe. Al acercarnos veremos murciélagos que viven dentro. Manuel Benito lo describía así en el 2004 en el Diario del Altoaragón "entre los siglos XIX y XX se excavó un aljibe en el Camino de la Armunia de mayor capacidad que recoge aguas de lluvia mediante filtraciones, a través de dos caños practicados a poniente y a septentrión. La obra se dio por finalizada en 1930 con una caseta en cuya puerta de acceso metálica figura la fecha.
Bajada al aljibe |
Es una excavación a cielo abierto en forma de rectángulo cuyo lecho se apisonó bien para evitar perdidas, sin poder distinguir, por estar cubierto de agua, el posible enlosado. En el lado Este (por el que llega el camino desde el pueblo) se practicó una escalera de peldaños encementados a la que se accede por la caseta mencionada.
Pozo Aljibe |
Los otros tres lados se defendieron con sillería muy irregular con partes almohadilladas y otras muy rectas, colocadas a soga mayoritariamente. A poniente se abre un caño o gotero de remate en medio punto y otro igual al norte, ambos captan agua de las filtraciones en los suelos aledaños. El techo se cubre de una serie de pequeñas bóvedas transversales, formadas por ladrillos macizos que se apoyan en vigas de hierro. Estas a su vez descansan en los muros a través de pequeños pilares de ladrillo que le dan un aspecto más airoso y hacen la cubrición menos plúmbea."
3. Lavadero
En el kilómetro 2,3 nos encontramos un lavadero. Sorprende lo lejos que se encuentra del pueblo. Manuel Benito lo describía así en el 2004 en el Diario del Altoaragón: "Lavadero hecho de piedras extraídas en canteras próximas según las medidas necesarias y rebajadas en la superficie para permitir el restregado y el enjabonado de las prendas.
Entorno lavadero y balsa de suministro |
La inexistencia de recursos hídricos en los términos, como se ha apuntado, hizo que el lavadero tuviera que complementarse con otras cimentaciones contiguas. En la cabecera se practicó una balsa redonda de dimensiones regulares para acopiar el agua necesaria y a los pies hay un depósito cuadrangular a donde iban a parar las aguas residuales que dada la escasez sería reutilizada para riego.
Lavadero |
El agua de la balsa situada en un plano superior podía decantarse mediante una conducción desaparecida en el lavadero que tenía una parte dedicada a la captación y remanso para la sedimentación de impurezas. El agua pasaba por rebosamiento una vez clarificada a la pila central donde se lavaba, vaciándose en el depósito último que aún se pergeña en el terreno. Este complejo hídrico de fines higiénicos parece obra popular del siglo XX."
4. San Cosme
En el kilómetro 3,6 nos encontramos la ermita de San Cosme. El paisaje es muy amplio. Se va en romería el 27 de setiembre. Los vecinos de Antillón tienen advocación por la Virgen del Pueyo (18.5 kilómetros en línea recta) debido a la aparición de la niña perdida Josefa Palacios en una romería en 1634 a esta ermita.
Manue Benito lo cuenta así: "Por cierto que, en una romería que se hizo a la ermita de los santos médicos surgió una fiesta votiva que aún se conserva. Cuentan que el día de la Ascensión de 1634 al volver los romeros de dicha ermita echaron en falta a una niña llamada Josefa, hija de Clemente Palacio y María Mancho. Fueron éstos a buscarla sin éxito por lo que hubieron de pedir auxilio a todo el pueblo. Organizaron la búsqueda durante tres días en que empezaron a desesperar. La madre de la niña fue al Pueyo de Barbastro e hizo voto a la Virgen de que si la hallaban ilesa le daría su peso en grano, pagaría una misa y cuando tuviera edad la entregaría al santuario para servir en él un año.
En el kilómetro 3,6 nos encontramos la ermita de San Cosme. El paisaje es muy amplio. Se va en romería el 27 de setiembre. Los vecinos de Antillón tienen advocación por la Virgen del Pueyo (18.5 kilómetros en línea recta) debido a la aparición de la niña perdida Josefa Palacios en una romería en 1634 a esta ermita.
Romeros andando desde Antillón al Pueyo el 26 de julio de 2014 |
Manue Benito lo cuenta así: "Por cierto que, en una romería que se hizo a la ermita de los santos médicos surgió una fiesta votiva que aún se conserva. Cuentan que el día de la Ascensión de 1634 al volver los romeros de dicha ermita echaron en falta a una niña llamada Josefa, hija de Clemente Palacio y María Mancho. Fueron éstos a buscarla sin éxito por lo que hubieron de pedir auxilio a todo el pueblo. Organizaron la búsqueda durante tres días en que empezaron a desesperar. La madre de la niña fue al Pueyo de Barbastro e hizo voto a la Virgen de que si la hallaban ilesa le daría su peso en grano, pagaría una misa y cuando tuviera edad la entregaría al santuario para servir en él un año.
Virgen del Pueyo en Antillón |
Tras la promesa volvieron a buscarla y a uno de sus tíos se le ocurrió cruzar el barranco Regatiello, metiéndose en términos de Bespén, donde la halló en la partida de Cavero, en medio de una gran maleza, desnuda pero intacta. Al preguntarle que le había pasado narró como se fue perdiendo sin darse cuenta hasta que una mujer la ayudó a cruzar el barranco, cuidándola por la noche y dándole un huevo para comer. Cuando la llevaron al Pueyo a dar gracias, la niña identificó a su bienhechora con la imagen mariana. Desde entonces el pueblo va todos los años a cumplimentar el voto."
5. Noria
En el kilómetro 4,6, llegando al pueblo, nos encontramos un antigua noria que servía para regar la huerta pertenecientes al barón. A su lado nos encontramos una balsa de almacenamiento con paredes de piedra
Ermita de San Cosme |
En el kilómetro 4,6, llegando al pueblo, nos encontramos un antigua noria que servía para regar la huerta pertenecientes al barón. A su lado nos encontramos una balsa de almacenamiento con paredes de piedra
Edificio donde se encuentra la noria |
6. Balsa
Ya entrando en el pueblo nos encontramos una balsa formada por aguas de lluvia que sirve de abrevadero de las ovejas.
Ya entrando en el pueblo nos encontramos una balsa formada por aguas de lluvia que sirve de abrevadero de las ovejas.
Balsa para abrevar |
Esta ruta de casi 5 km. por Antillón pasa cerca de la "nacional I" romana que fue la Tarraco-Osca-Cesaraugusta.
El día que la recorrí atardecía. Los colores y paisaje me llevaban al mediterráneo desde el alto de la ermita de San Cosme. ¡Cuántas tardes Antilio, ex legionario romano, tuvo esta sensación hace casi 2.000 años tomando un vino en aquella hacienda que le ofrecieron tras licenciarse del ejército para poder jubilarse y no regresar a su Roma natal.
¡Cuántas noches aquel vino le adormecería la morriña contemplando a lo lejos Berbegal, y más lejos ... su patria!
Regreso a Antillón exhausto por el calor de esta tarde de Julio. Tomo un poco de queso y vino de Valdovinos. Seguro que Antilio me estaba mirando satisfecho.
El día que la recorrí atardecía. Los colores y paisaje me llevaban al mediterráneo desde el alto de la ermita de San Cosme. ¡Cuántas tardes Antilio, ex legionario romano, tuvo esta sensación hace casi 2.000 años tomando un vino en aquella hacienda que le ofrecieron tras licenciarse del ejército para poder jubilarse y no regresar a su Roma natal.
¡Cuántas noches aquel vino le adormecería la morriña contemplando a lo lejos Berbegal, y más lejos ... su patria!
Regreso a Antillón exhausto por el calor de esta tarde de Julio. Tomo un poco de queso y vino de Valdovinos. Seguro que Antilio me estaba mirando satisfecho.
A pocos kilómetros, yendo a Barbastro, nos encontramos Pertusa (Pinchar para ver información en el blog de sus puentes sobre el Alcanadre) en el trazado de la vía romana que iba a Berbegal.
Daniel Vallés Turmo